Una de las diferencias más claras entre escribir una novela y redactar otros tipos de texto es que una novela suele tardar más tiempo en desarrollarse.
Pero eso es bueno.
Escribir de manera regular va muy bien para la mente. Y si es para hacer una novela, entonces aporta beneficios extra.
Beneficios de escribir una novela
Estas son las 15 ventajas más importantes:
1. Aprender
Una novela sirve para muchas cosas, pero sobre todo para aprender.
Tendrás que conocer algunos elementos que incluyas en la historia con mucho detalle para poder describirlos de manera precisa.
Eso te obliga a tener una mente abierta y curiosa, a investigar y a observar las cosas con diferentes perspectivas, ya que tendrás que ponerte en el lugar de distintos personajes.
Por lo tanto, si hay algún aspecto que te gustaría conocer en mayor profundidad, añádelo a tu historia.
2. Escribir mejor
Tu técnica de escritura subirá de nivel.
Además, muchas veces buscarás cómo se escriben ciertas palabras, usarás sinónimos y comprobarás definiciones.
En definitiva, tu ortografía mejorará y tu vocabulario aumentará.
3. Comunicar con más precisión
Al escribir una novela, no solo enriquecerás tu competencia léxica con más vocabulario, sino que además tendrás una capacidad mayor sobre cómo usarlo y construir frases más adecuadas.
Al trabajar los diálogos de los personajes desarrollarás la empatía y la psicología de la comunicación.
En definitiva, conseguirás más recursos lingüísticos, por lo que te será mucho más fácil elegir las palabras precisas cuando quieras expresar algo, ya sea de manera oral o escrita.
4. Mantener la concentración
Notificaciones en el teléfono móvil, publicidad por la calle, llamadas inesperadas, mil cosas en las que pensar…
Es posible que mantener la concentración no haya sido nunca tan difícil como hoy.
Nuestra capacidad de estar centrados en algo específico durante un tiempo prologando es un verdadero reto.
Pero hacer una novela te puede ayudar a mejorar mucho en este aspecto, ya que necesitas escribir frases, párrafos y capítulos enteros de manera coherente.
5. Reforzar la memoria
Una historia completa requiere relacionar momentos diferentes.
Por lo tanto, tendrás que trabajar la memoria y recordar distintos momentos para establecer conexiones entre escenas a lo largo de la historia. Esto es fundamental para que la novela tenga sentido en su conjunto.
Poco a poco conseguirás retener mejor la información.
6. Desarrollar la creatividad
Esta es probablemente la ventaja más mágica.
Crear personajes para una novela y establecer las experiencias que les ocurren requiere mucha creatividad. Tendrás que pensar largo y tendido sobre ciertos momentos para llegar a conclusiones muy detalladas.
Al fin y al cabo, estarás creando situaciones diversas a partir de tu propia imaginación, conocimiento y experiencia, de hechos reales y posiblemente de vivencias de otras personas.
Construirás experiencias literarias en un documento en blanco. Por eso sentirás que haces magia.
7. Desahogarse
Pues sí, escribir es terapéutico. Te permite tener una conversación contigo mismo.
En ocasiones tenemos sentimientos que no comunicamos a nadie más, ya sea por verguenza, impotencia o cualquier otro motivo. Pero, si no compartimos esa emoción, puede acabar haciéndonos daño.
Escribir sirve para expresarnos, sacar lo que llevamos dentro y aliviar la mente, entre otras cosas.
Si bien es cierto que cuando pensamos en publicar una novela hay que escribir también para un público, nadie te quitará esos momentos íntimos de escritura que te harán sentir mejor.
Y, si tienes un mal día, podrás usar insultos en los diálogos de los personajes.
8. Entretenerse
Cuando tienes tiempo libre, puedes leer, jugar, disfrutar de la historia de una serie… pero, ¿qué te parece hacer las tres cosas a la vez?
Escribir una novela es un modo muy recomendable de disfrutar de los ratos libres. No es un modo de pasar el tiempo, sino más bien una inversión de esos instantes, ya que podrás beneficiarte del resto de ventajas que indicamos en esta página.
Es probable que en ocasiones te resulte difícil empezar a hacer una novela porque, admitámoslo, requiere esfuerzo.
Pero a medida que te acostumbres a tu rutina de escritura y empieces a jugar con las distintas escenas, verás que será un entretenimiento divertido, útil y original.
9. Conocerse mejor
Un papel en blanco puede ser tu psicólogo. Especialmente cuando se usa para escribir una novela.
Para crear personajes convincentes y diálogos significativos hay que reflexionar en detalle sobre cómo es una persona y por qué actúa de un modo u otro en cada escena.
Deberás analizar sus relaciones con otros personajes y con ellos mismos para que puedan afrontar sus conflictos durante la historia.
Gracias a eso, también puedes tratar muchos aspectos de tu propia personalidad y llegar a conocerte a un nivel muy profundo. De ese modo, también disfrutarás más de tus momentos de soledad.
10. Conocer mejor a otras personas
Cuando se habla con alguien en persona, solemos pensar más en qué y cómo responder a lo que ha dicho que en por qué lo ha dicho.
Pero al crear los personajes de una novela, eso cambia. El por qué alguien dice algo debe estar bien claro en la mayoría de las ocasiones.
Escribir nos da el beneficio principal de pensar en lo que queremos comunicar sin necesidad de expresar algo de manera tan instantánea como en una conversación oral real.
Eso nos ayuda a tener el contexto más en cuenta y a fijarnos en detalles muy importantes como la comunicación no verbal. Así podemos empatizar más con las personas, desenvolvernos mejor en las interacciones sociales, conocer gente y tener relaciones de muy buena calidad.
11. Ser más fuerte
Una buena historia incluye, como mínimo, un gran conflicto que los personajes principales deberían resolver.
Pero antes de que lo resuelvan tus personajes, lo tendrás que solucionar tú en tu mente.
Elaborar una buena trama narrativa te fuerza a pensar con detenimiento para encontrar la mejor solución a los problemas. Eso implica que tienes que trabajar tu capacidad para tomar decisiones y fijarte en los detalles. En cierta manera, también te hacer ser más optimista, creativo y resolutivo.
Como ves, escribir una novela te ayuda a fortalecer la mente.
12. Inspirar
Las emociones son un ingrediente fundamental para crear una novela. Si una historia no emociona al lector, no vale la pena publicarla.
Hay momentos mientras se escribe que son… inolvidables. Ya sea porque se tiene una idea original o porque un personaje consigue algo que parecía imposible.
Y son esos instantes los que nos inspiran como escritores.
¿Y sabes lo mejor? Que esa inspiración se transmite a través de las palabras, por lo que los lectores también pueden sentir la misma emoción. Esa conexión entre la mente escritora y lectora es realmente especial.
Pero no solo inspirarás a través de las escenas de la historia. Tener la valentía de publicar un texto ya es admirable de por sí, por lo que ser escritor o escritora inspira a muchas personas.
13. Mejorar la disciplina
Ponerse la meta de hacer una novela y conseguirlo no es fácil.
Hay que ser constante, esforzarse mucho durante un tiempo, al menos hasta que se adquiere el hábito. Tendrás que hacer algún sacrificio para cumplir con la rutina de vez en cuando, creer en ti y no desistir.
Tu disciplina se reforzará a medida que avances hacia tu objetivo a unos niveles que quizá te parecían imposibles al principio.
14. Ganar dinero
Es difícil, sí. Pero totalmente posible.
Cuando se publica una novela, lo más común es ponerla en venta.
Y según el esfuerzo, la estrategia de marketing que se lleve a cabo y la calidad de la obra, se puede conseguir una suma muy interesante.
De hecho, y a pesar de que las posibilidades de conseguirlo son muy bajas, ganar dinero puede ser un objetivo principal para muchas personas que se lanzan a la aventura de escribir.
No obstante, el objetivo principal debe ser disfrutar del proceso.
15. Aumentar el ánimo
No hay duda de que todos los beneficios anteriores juntos conseguirán que te suba el ánimo y la autoestima.
Si en algún momento estás de bajón, solo con que recuerdes que fuiste capaz de lograr este objetivo de hacer una novela entera, te llenarás de energía.
Llegar hasta el último capítulo de tu historia y terminarlo puede cambiarte la vida. Y si publicas tu obra, también puedes mejorar la vida de otras personas.
Si quieres disfrutar de estos beneficios y sacarle provecho a tus sesiones de escritura, puedes ver nuestro artículo sobre cómo escribir una novela.